Supongo que ya no quedará nadie al otro lado de estas líneas, pero escribo por si alguno aún no abandonado la esperanza de que regrese por aquí. Nunca he sido muy constante en mis diarios: hay demasiadas cosas que vivir y muy poco tiempo para escribir sobre ellas (así que hay que seleccionar).
Como guinda a mi mes de septiembre, en el que viví uno de los momentos más especiales que se pueden vivir (la boda de mi hermano) y uno de los más estresantes que se pueden vivir (XIX Congreso Internacional de ASELE) he comenzado a dar clase en un instituto. Sí señores, la vida de caracol-interino ha llegado para mí y ¡bien contenta que estoy!
A partir de ahora me puedes buscar en el IES Albarregas, aunque sólo andaré por allí hasta diciembre.
Seguiré informando desde Mérida.
Como guinda a mi mes de septiembre, en el que viví uno de los momentos más especiales que se pueden vivir (la boda de mi hermano) y uno de los más estresantes que se pueden vivir (XIX Congreso Internacional de ASELE) he comenzado a dar clase en un instituto. Sí señores, la vida de caracol-interino ha llegado para mí y ¡bien contenta que estoy!
A partir de ahora me puedes buscar en el IES Albarregas, aunque sólo andaré por allí hasta diciembre.
Seguiré informando desde Mérida.